El yeso es uno de los sistemas de protección pasiva contra el fuego más confiables y utilizados en la construcción. Sus propiedades únicas lo hacen altamente efectivo en la protección contra incendios. La protección pasiva contra incendios busca evitar o retrasar la propagación del fuego y el calor. Los materiales ignífugos son fundamentales para lograr este objetivo. Estos materiales están diseñados para resistir altas temperaturas y, en muchos casos, para extinguir el fuego en sí mismo.
Algunos aspectos clave del yeso
El yeso cumple con los estándares de construcción y las regulaciones contra incendios en todo el mundo, lo que lo convierte en un material de elección en proyectos de construcción. A continuación, enumeramos algunas características a destacar del yeso:
- Retardante del fuego
El yeso retarda significativamente la propagación del fuego al liberar agua en forma de vapor cuando se expone al calor. Esto enfría la superficie y, en última instancia, limita el avance del incendio.
- Revestimientos ignífugos
El yeso se utiliza comúnmente como revestimiento en vigas de acero y columnas, proporcionando una barrera ignífuga que protege la estructura subyacente.
- Paneles de yeso ignífugos
Los paneles de yeso resistentes al fuego se instalan en paredes y techos para retrasar la propagación del fuego y ofrecer a las personas más tiempo para evacuar el edifici
Otros materiales ignífugos
Si bien el yeso es un material ignífugo destacado, existen otros materiales en este ámbito. Estos incluyen lana mineral, mortero refractario, vidrio resistente al fuego y materiales intumescentes, que se expanden cuando se calientan para formar una barrera protectora.